¿Cómo afecta el frío en la piel?

Cuida tu piel en invierno

¿Has pensado cómo las temperaturas extremas y el cambio de estaciones afecta a tu piel? Los extremos nunca son buenos. A continuación, vamos a profundizar en cómo afecta el frío a nuestra piel y qué precauciones debemos tomar para seguir manteniendo una piel saludable, hidratada y luminosa. ¿Me acompañas?

La bajada de temperaturas pone en alerta a nuestra piel y reacciona estrechando los vasos sanguíneos para proteger el cuerpo frente a la pérdida excesiva de calor. Ese esfuerzo limita el aporte de oxígeno y nutrientes a nuestra piel, ocasionando, en casos extremos, la muerte celular. Por lo tanto, el frío se refleja en nuestro rostro y el resultado es una piel muy seca, apagada y deshidratada. 

La filosofía de Levid es clara: "mantener una piel saludable requiere conocimiento y constancia". Los estados de la piel son temporales y en muchas ocasiones entran en desequilibrio. Una piel en mal estado es importante que se recupere y por eso, debemos entender qué piel tenemos y que necesita. Recuerda, cualquier estado es modificable y una piel sana debe ser tu prioridad. 

¿Cuál es la clave para combatir los efectos del frío en la piel?

Es crucial evitar una alteración de la barrera hidrolipídica, que es la encargada de proteger la piel de los factores externos. Por eso, debemos priorizar una hidratación profunda con ingredientes altamente nutritivos. 

Los antioxidantes y los aceites no comedogénicos son una opción interesante y eficaz para mantener una hidratación prolongada y evitar la pérdida de agua celular. La piel del rostro influye sobre nuestro bienestar emocional y en Levid no hablamos de frío o calor, sino de belleza. 

Empezar un día de invierno es más fácil con la rutina facial adecuada, ¿no crees? En Levid siempre recomendamos el Sérum, el Contorno de ojos y la Crema de día SPF25. 

El Vin-up Lift, el antioxidante natural por excelencia que está presente en todos los productos, combinado con aceites no comedogénicos como el aceite de rosa mosqueta, que se encuentra en el Sérum, el aceite de ricino, presente en el Contorno de ojos o el aceite de argán que incorpora la Crema de día, son sinónimo de estabilidad y piel sana. 

Estados de la piel

Recuerda, los estados de la piel son temporales y cuando sufren alteraciones no debemos preocuparnos más de la cuenta si actuamos en consecuencia. La experiencia nos ayuda a entender mejor qué necesita nuestra piel en cada momento del año y el frío no es la excepción.

Por último, y no menos importante, la temperatura del agua también influye en nuestra piel. Aunque en muchas ocasiones es apetecible y lo entendemos, debemos tener cuidado con el agua muy caliente. La ducha a alta temperatura altera claramente la barrera hidrolipídica, deshidrata la piel y favorece la aparición de descamación e irritaciones. ¡Los extremos nunca son buenos! 

La constancia y el conocimiento son la base del éxito